Madrid tiene muchas cosas que ver, pero entre las más bellas está el Palacio Real de Madrid.
Si tienes medio día en tu viaje, es un sitio muy aconsejable. La capital de España merece la pena conocerla y no solo son museos, aunque tenga algunos de los mejores del mundo.
La visita al Palacio Real merece mucho la pena y merece más la pena que algunos de otras casas reales que todos conocemos y que luego vas allí y son la mitad de grandes que el madrileño.
Además, tienes la catedral de la Almudena al fondo, que si bien es una catedral de nuevo cuño o reciente, conforma con conjunto bastante atractivo.
Historia del Palacio Real de Madrid
El Palacio de Oriente (Palacio Real) tiene un antecedente, el Real Alcázar, que es una fortaleza levantada en el mismo solar donde actualmente está la construcción barroca.
La estructura se reformó varias veces, pues para el rey Enrique III de Castilla fue una de las residencias a la que más acudía, obteniendo después el objetivo de «real».
Su hijo Juan II se encargó de edificar la Capilla Real y varias dependencias. La Guerra de Sucesión Castellana que ocurrió en 1.476 provocó que las tropas de Juana la Beltraneja se sitiaran en el Alcázar, esto provocó algunos daños en el castillo.
Carlos I el emperador, empezó a reformar en estilo renacentista el Alcázar, pero realmente fue Felipe II el que impulsó la mayor parte de las obras al contratar artistas de Italia, Francia y los Países Bajos. En aquel entonces construyó la Torre Dorada y la Real Armería, que se derribó en 1.894. Al monarca le siguieron Felipe III, Felipe IV y Carlos II, responsables de continuar el proyecto.
Cuando llega al trono Felipe V de Borbón en 1.700 pensó que el antiguo Alcázar era muy austero y se había quedado anticuado, por lo que se encargo de realizar nuevas reformas.
La reina María Luisa Gabriela de Saboya y la Princesa de Ursinos fueron las encargadas de decorarlo al estilo francés. En la nochebuena de 1.734 un incendio parcial significó la excusa para su demolición casi por completo, ya que quedó parte de los cimientos y alguna estructura. Se mandó construir un palacio nuevo a la moda de la época.
Las obras empezaron en 1.738. A fin de evitar futuros incendios, el nuevo palacio se hizo por entero de fábrica y la madera solo se utilizó en la carpintería y estructuras de la cubierta. Cuando visitamos el Palacio Real de Madrid, lo primero que hay que hacer cuando entramos en tomar el folleto donde nos viene la historia de Madrid y su Palacio y las habitaciones que pueden visitarse.
Lo que podemos ver hoy es el resultado de varias modificaciones que se han encargado de restaurarlo y hacerlo la residencia oficial de los reyes.
¿Qué se puede ver en el Palacio Real de Madrid?
Todo depende del interés que tengas, pero una visita al Palacio Real de Madrid puede llevarte media mañana, especialmente si vas acompañado de alguien que te explique la visita.
Además, debes saber que no se pueden ver todas las estancias del Palacio ni se pueden hacer fotos.
Vamos con las partes principales de la visita al Palacio:
- La Plaza: La entrada al Palacio, con esas grandes dimensiones es impresionante. Desde aquí se entra en sí al Palacio, al mirador, Real Armería o exposiciones de carácter temporal. Es un lugar imponente y único. Un gran lugar para tomar fotografías.
- La Armería del palacio: Se encuentra en uno de los costados del edificio. Aquí podrás ver gran cantidad de armas, armaduras y representaciones de jinetes montados a caballo que te fascinará.
El Palacio
La entrada es espectacular, ya que lo primero que se puede ver es la escalera diseñada por el arquitecto Sabatini. El único lugar en el que podrás tomar fotos de toda la visita.
Además, tenemos las obras en el techo que muestran una grandeza digna de admiración.
En esta zona del Palacio Real podemos disfrutar de un gran número de salas y habitaciones. La más espectacular es la sala del Trono, lugar donde solía pasar mucho tiempo el rey y lugar donde recibía a los nobles.
Esta zona ha mantenido su cometido desde su creación, una de las pocas salas del palacio que pueden decirlo. De aquí hay que destacar el formidable techo y las obras de arte que lo adornan.
En cuanto al resto de decoración, compuesto de telas y mobiliario de la Sala del trono, podemos decir que se debe a Battista Natali.
Mirador de los jardines (Campo del Moro)
Estos jardines son uno de los lugares más destacados. Las vistas desde el Palacio Real de Madrid no son muy especiales, pero desde fuera del Palacio si accedemos por la puerta principal de los jardines, todo cambia de una forma drástica.
Es aconsejable entrar por aquí y dar un paseo sin prisa, ya que aquí podrás ver una extensa zona verde ideal para hacer fotografías.
Información útil
Si quieres visitar el Palacio Real de Madrid debes saber lo siguiente:
Si tienes la tarjeta iVenture Card de Madrid, tienes una visita guiada gratuita. Eso sí, requiere reserva previa.
¿Dónde podemos comprar las entradas?
Una manera de evitarse colas es adquirir las entradas desde Internet.
Lo más normal es ver largas colas, que pueden durar hasta más de una hora por parte de la gente que no ha adquirirlo la entrada por Internet, la cual debes comprar al menos 24 horas antes.
Horarios para visitar el Palacio Real
- Horario de invierno: 10 – 18h
- Horario de verano: 10 – 20h
- Tarifa: 11€ (Tarifa reducida 6€)
¿Cómo llegar al Palacio de Madrid?
El Palacio se encuentra en la famosa Plaza de Oriente, estando situada la entrada en la plaza de la Catedral de la Almudena de Madrid.
La mejor forma de llegar es mediante el metro de Madrid, bajando en la parada de Ópera.
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